CCOO que, junto a UGT, ha expresado su apoyo y solidaridad a las reivindicaciones de la Federación Estatal de Entidades Locales Menores
La supresión de las entidades locales menores "es un atentado a la democracia"
La medida del Gobierno tendrá
graves consecuenciales sociales y medioambientales en miles de
municipios, según CCOO que, junto a UGT, ha expresado su apoyo y
solidaridad a las reivindicaciones de la Federación Estatal de Entidades
Locales Menores (FAEM). Ambos sindicatos instarán al Gobierno para que
revoque su decisión de suprimir estas entidades y apoyarán la
manifestación del 10 de septiembre en Madrid.
"Las entidades locales no son deficitarias, al contrario, 3.000 de un total de 3.723 presentan superávit"
Tras el encuentro que han mantenido
esta mañana con esta organización que defiende el mantenimiento de las
3.723 entidades locales menores de España, el secretario de Comunicación
de CCOO, Fernando Lezcano, y el de Internacional de UGT, Manuel
Bonmati, han anunciado en la rueda de prensa conjunta con FAEM la
decisión de ambos sindicatos de instar al Gobierno para que revoque su
decisión de suprimir dichas entidades, así como dirigirse a los
distintos grupos parlamentarios para que voten en contra. También han
informado de que apoyarán la manifestación convocada por esta federación
para el día 10 de septiembre en Madrid.
"Nuestra solidaridad y comprensión, y nuestro compromiso para que se preserve la calidad de nuestra democracia", señaló el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, quien alertó de que con medidas como la de supresión de las entidades locales "se está generando una crisis política y social", ya que a su juicio "después de la crisis económica, habrá menos democracia".
Según Lezcano, el Gobierno actúa con las entidades locales como con colectivos como el de los empleados públicos, se caracteriza por ser fuerte con los débiles y débil con los fuertes. "Cree que es más fácil meterse con estas entidades que no son responsables del déficit de la Administración Local, que con el Ayuntamiento de Madrid, el más endeudado de España", explicó. "No se va a resolver el problema del déficit, pero van a debilitar la administración municipal a costa de la democracia y del empleo", añadió.
En la misma línea, el presidente y el secretario general de FAEM, Antonio Martín Cabanilles y Miguel Gregorio Martínez, respectivamente, insistieron en que las entidades locales no son deficitarias, al contrario, 3.000 de un total de 3.723 presentan superávit. Según explicaron, las entidades locales son las únicas administraciones públicas sin déficit, no suponen ninguna carga para el Estado, por lo que la decisión de suprimirlas sólo puede entenderse como una operación de marketing político. "El Gobierno quiere hacer ver a Bruselas que ha adelgazado la administración para ahorrar, cuando resulta que no suponemos ninguna carga para el estado", aseguraron.
En su opinión, por tanto, se trata de un ataque a la democracia, ya que los alcaldes de estas entidades son elegidos por democracia directa, en listas abiertas, que tendrá graves consecuencias sociales y medioambientales, además de en el empleo, en miles de municipios rurales.
"Nuestra solidaridad y comprensión, y nuestro compromiso para que se preserve la calidad de nuestra democracia", señaló el secretario de Comunicación de CCOO, Fernando Lezcano, quien alertó de que con medidas como la de supresión de las entidades locales "se está generando una crisis política y social", ya que a su juicio "después de la crisis económica, habrá menos democracia".
Según Lezcano, el Gobierno actúa con las entidades locales como con colectivos como el de los empleados públicos, se caracteriza por ser fuerte con los débiles y débil con los fuertes. "Cree que es más fácil meterse con estas entidades que no son responsables del déficit de la Administración Local, que con el Ayuntamiento de Madrid, el más endeudado de España", explicó. "No se va a resolver el problema del déficit, pero van a debilitar la administración municipal a costa de la democracia y del empleo", añadió.
En la misma línea, el presidente y el secretario general de FAEM, Antonio Martín Cabanilles y Miguel Gregorio Martínez, respectivamente, insistieron en que las entidades locales no son deficitarias, al contrario, 3.000 de un total de 3.723 presentan superávit. Según explicaron, las entidades locales son las únicas administraciones públicas sin déficit, no suponen ninguna carga para el Estado, por lo que la decisión de suprimirlas sólo puede entenderse como una operación de marketing político. "El Gobierno quiere hacer ver a Bruselas que ha adelgazado la administración para ahorrar, cuando resulta que no suponemos ninguna carga para el estado", aseguraron.
En su opinión, por tanto, se trata de un ataque a la democracia, ya que los alcaldes de estas entidades son elegidos por democracia directa, en listas abiertas, que tendrá graves consecuencias sociales y medioambientales, además de en el empleo, en miles de municipios rurales.
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